4. Cuando parece el final de todo, Dios te abre camino.
Los israelitas cruzan el Mar Rojo Éxodo 14
Recientes investigaciones han determinado que entre Nuweiba a Arabia Saudita, Ciudad costera en la península del Sinaí se encuentra un lugar con unas características y hallazgos que determinan la veracidad de este suceso.
Versículo 10
Y cuando Faraón se hubo acercado, los hijos de Israel alzaron sus ojos, y he aquí que los egipcios venían tras ellos; por lo que los hijos de Israel temieron en gran manera, y clamaron a Jehová.
Temieron en gran manera
El pueblo de Israel tuvo temor, pensaron que era su final, sim embargo no era eso lo que Dios tenia determinado para ellos, ni tampoco lo que les había prometido.
Éxodo 14:16 Y tú alza tu vara, y extiende tu mano sobre el mar, y divídelo, y entren los hijos de Israel por en medio del mar, en seco.
Éxodo 14:21 Y extendió Moisés su mano sobre el mar, e hizo Jehová que el mar se retirase por recio viento oriental toda aquella noche; y volvió el mar en seco, y las aguas quedaron divididas.
Éxodo 14:26 Y Jehová dijo a Moisés: Extiende tu mano sobre el mar, para que las aguas vuelvan sobre los egipcios, sobre sus carros, y sobre su caballería.
La vara de Moisés representa el poder de Dios en mi vida, la vara hace el milagro, pero debes extender tu mano y alzar la vara.
Debemos aprender a vivir por FE, a depositar todas nuestras esperanzas en el Señor, Él es nuestra seguridad, nuestro descanso, nuestra provisión, nuestra paz, y el que batalla por nosotros.
Cuando levantes tu mano y alces la vara no puede ver duda en tu corazón y en tu mente.
¿Qué implica levantar la mano?
Cuando levantamos nuestra mano, podemos hacerlo para decir: Aquí estoy, estoy presente, pero presente delante de Dios, implica tener una vida de Adoración y Alabanza, batallando a través de estas disciplinas y herramientas espirituales poderosas que Dios nos dio.
Cuando sientas que ya no puedes avanzar, que ya no puedes continuar, entonces debes entender que no depende de ti, si no, de levantar tu mano delante de la presencia de Dios, y permitirle a Él que te lleve por una vida sobrenatural. Que abra camino donde no lo hay, que aunque la realidad y la lógica sean evidentes, tu confianza puesta en Dios sea mayor.
Si Dios te lleva al borde del Mar Rojo, No es para ahogarte, es para mostrarte, cómo te abre camino en medio de él.